El támesis se desborda a su paso por Oxford, las inundaciones afectan ya a grandes zonas del centro y sur del país. Reino Unido padece las peores inundaciones de los últimos 60 años, trescientas cincuenta mil personas continúan sin agua potable, mientras son abastecidas por camiones cisterna, la Asociación de Aseguradoras Británicas dijo que el daño podría ascender a cientos de millones de libras.
El chaparrón que azota Gran Bretaña parece caer también sobre la cabeza de David Cameron, que ha bajado en las últimas encuestas, mientras el líder Laborista, parece haber agarrado bien el flotador y se mantiene a flote.
Esperemos que este chaparrón dure poco y como dicen, que después de la tormenta llegue la calma.
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